Digamos que si siempre has sido un fan del automovilismo, tienes entre 30 y 50 años, has trabajado durante años y tienes unos 25.000 a 30.000 euros en el banco, como para darte un gusto, y si tu sueño sería conducir un auto deportivo en la soledad de una amplia carretera en los pirineos, sintiéndote en armonía perfecta con la máquina, cortando el aire como un F-22 humano…
Vuelve a la realidad. Es probable que no estés en una condición física ni familiar que te permita arriesgarte a sufrir un accidente de alta velocidad en una motocicleta. Por eso para tí y para todos los que soñamos con experimentar la sensación de libertad y el placer tecnológico de ser un piloto de carreras, se ha creado el Ariel Atom.
Características
Porque no hay carrocería (en realidad, porque no hay prácticamente nada que no sea lo esencial), este bólido pesa menos de 500 kg, lo que en términos de automóviles es prácticamente nada, y por si fuera poco tiene un look a la “Lotus Elise” envidiable.
Podrías colocar en esta carrocería el motor de un molinillo de pimienta, y aceleraría como el Apolo 8. Por suerte, el Atom utiliza el motor VTEC de Honda, el mismo que puede encontrarse modificado en un Honda Civic.
Obviamente, se le presta atención a la aerodinámica en este modelo. Si bien la velocidad máxima es de alrededor de 220 kilómetros por hora, el tiempo que se necesita para acelerar de 0 a 100 km/h es… toma asiento por favor… de sólo 3.5 segundos. Simplemente alucinante.
Estamos hablando de una aceleración que podríamos esperar de una motocicleta de carreras, pero debido a que el Atom tiene cuatro ruedas, si no estás en forma o no quieres enfrentarte a los riesgos de conducir a altas velocidades en un vehículo que se caería de no estar en movimiento, el Ariel Atom es lo más cercano que la mayoría de nosotros podría estar a conducir una motocicleta o un auto de carreras.
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